Cuando hablamos de liderazgo con visión de género estamos haciendo referencia a hacernos cargo de una necesidad real y tangible de la sociedad actual. Las organizaciones deben en su fuero interno diseñarse y desarrollarse con un plan de liderazgo de género a corto plazo. 


¿Por qué es una necesidad?

Porque hoy en día las organizaciones requieren diseñar y repensar estrategias y políticas que fomenten la igualdad y la diversidad, respetando los roles y estereotipos que cada género cumple en la sociedad.

Es sabido que hombres y mujeres lideran los espacios de trabajo de manera diferente. La forma de conducir es distinta e incluyente. Aprender lo mejor de cada género marca la diferencia a la hora de liderar.

Los caminos profesionales de hombres y mujeres aún siguen siendo diferentes a la hora de poner en práctica el liderazgo. Las oportunidades de ejercer puestos de poder viene in crescendo para las mujeres, aunque es importante destacar los espacios o periodos de meseta en los que pareciera ser que el crecimiento tiene un techo. 

Sin embargo, al hablar de liderazgo con perspectiva de género, no se debería hacer distinción entre uno y otro sexo. Es decir, no importa quién ejerza este liderazgo, sino que lo que verdaderamente importa es que, sea quien sea este líder, actúe de acuerdo a las nociones de igualdad, integración y diversidad.


Liderazgo de las mujeres

  • ¿Cuál es el papel que las mujeres tienen en el mundo del liderazgo?
  • ¿Qué tipo de decisiones toman las mujeres? ¿Desde qué lugar lo hacen? 
  • ¿Qué repercusiones genera en el mundo organizacional el acceso a puestos directivos de las mujeres? 
  • ¿Cuán preparados estamos para ser inclusivos e integrativos?

 El mundo nos ha permitido caminar hacia la concreción del liderazgo femenino sin embargo pareciera ser que llegado un punto, se produce un atascamiento real. El avance es forzado y difícil. No para todas, lógicamente; pero sí para una gran mayoría.  Existe un fenómeno llamado “El techo de cristal” que pone un límite al crecimiento de la mujer cuando la contraparte masculina está disputando el mismo puesto.  


¿Cómo ejercer un liderazgo con perspectiva de género?

Les ofrecemos las siguientes preguntas a fin de revisar su plan de liderazgo con visión de género:

  1. ¿Desde qué lugar contratamos? ¿Cuánto valoramos el talento en relación al puesto, independientemente del género masculino o femenino? 
  2. ¿Qué garantías de igualdad de oportunidades estamos ofreciendo a hombres y mujeres?  
  3. ¿Somos una empresa que fomenta el acceso de mujeres a puestos de relevancia, en la misma medida que los hombres?
  4. ¿Cómo actuamos cuando observamos casos de discriminación entre los miembros de la empresa?
  5. ¿Qué políticas de conciliación entre la viuda familiar y la laboral tenemos como empresa- tanto para hombres como para mujeres?  
  6. ¿Cómo aplicamos la perspectiva de género a la hora de diseñar las políticas de prevención de riesgos laborales?
  7. ¿Cuáles son los valores que fomentamos en la organización que contribuyen al desarrollo del liderazgo, la comunicación, la empatía y la innovación?
  8. ¿Cómo organizamos los equipos integrativos? ¿Es equitativa la participación de hombres y mujeres?  
  9. ¿Hemos creado y transmitido un código de conducta que fomente la igualdad y la diversidad? ¿Cuán accesible está para todos los empleados? 
  10. ¿Somos empáticos con las problemáticas de la vida diaria que pueden afectar a cada género y que pueden influir en su rendimiento laboral?

En definitiva, se trata de fomentar un cambio de cultura organizativa que no solo tenga en cuenta los modos de producción o liderazgo masculinos, sino que adopte una perspectiva global, igualitaria e integradora.


Nuestra propuesta de Liderazgo con visión de género propone trabajar los siguientes ejes: 

  • La sensibilidad propia de cada género: características y limites propios.
  • Determinación y flexibilidad
  • Toma de decisiones
  • Comunicación asertiva 
  • Identificación de perfiles conductuales.
  • Mundo emocional y mundo mental
  • Salud emocional y salud mental
  • Gestión de los conflictos
  • Habilidades de negociación
  • Percepción al servicio de los resultados
  • Gestión de las relaciones 
  • Confianza, autovaloración y el impacto en el sistema organizacional.

Nuestro Programa de Liderazgo con Visión de Género para el fortalecimiento del Bienestar Organizacional, ofrece a las empresas herramientas que les permitan disminuir la brecha existente con relación a la desigualdad de oportunidades, desigualdad de género y desgaste organizacional, procurando hacer hincapié en los siguientes ejes de intervención: 

  • Toma de decisiones
  • Trabajo remunerado y no remunerado
  • Motivación inteligente
  • Integración vida laboral-social y familiar.
  • Distribución equitativa de ingresos y responsabilidades

 El camino hacia la igualdad de oportunidades de trabajo y estudio es un camino que numerosas instituciones necesitan transitar.  Si bien existe una tendencia hacia la igualdad, la curva ascendente es lenta e incluso ha experimentado retrocesos, por lo cual- insistimos- es imprescindible prepararse para intervenir. 

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